Antropoturmix es una batidora multifunción mutante que viaja por la galaxia en misión parroquial, explorando ritos y creencias de otros mutantes
gracias por el pescado

El electrómetro de Hubbard mola mazo. De Cienciología y religión.

Una de las cosas más interesantes de algunas religiones contemporáneas es su arrebatador entusiasmo científicista, su incontenible pasión tecnológica, su tecno-panteismo, su materialismo trascendente, su biologicismo mágico, su genial ambición holística sin fronteras planetarias... Es lo más. Y aunque no es la única, ni desde luego la más descabellada, la Cienciología es la más famosa porque desde su origen se ha visto envuelta en una persecución mediática que la ha convertido en la víctima sacrificial perfecta, en el símbolo que condensa a los demonios familiares de la libertad de culto, como en otros tiempos la religión judía representó los demonios familiares de la falta de eso mismo. Y hasta donde apesta, lo que pasa con la Cienciología en Europa es un caso ejemplar de persecución religiosa postmoderna.

La noticia: 02/02/2012 condenados por "estafa en banda organizada"

En 1998, un par de ex-cienciologos denunciaron a la Iglesia de la Cienciología por haberles estafado la friolera de 21.000 y 49.500 pavazos a cada uno. Estos dos, iban un día por la calle a sus cosas y unos cienciólogos les dijeron que hacían análisis de personalidad gratuítos, y que si les enrollaba el asunto. Y ahí que se van a hacerse el análisis, tan contentos. Pero una cosa lleva a la otra y que si mira este libro, prueba este chisme, y a la que se dan cuenta se han dejado un pastizal en el camino. Entre las cosas en las que se habían gastado la pasta este par de ellos estaban los cursos y conferencias de la organización, los libros, "medicinas" y el famoso electrómetro de Hubbard, que me mola tanto.Y la Cienciología ha sido condenada a varias multas por dos cosas:  porque las víctimas se han considerado en el jucio personas en situaciones de vulnerabilidad y que el electrómetro de Hubbard es lo mismo que tener tos y rascarse la tripa... cosa que, por cierto, animó al Colegio de Farmacéuticos a sumarse a la acusación.

Algunos antecedentes significativos: la Laica Inquisión

Los cienciólogos se quejan (con argumentos históricos de peso) de que los tribunales franceses admiten a trámite todas y cada una de las denuncias contra la Cienciología desde que en los años 70 se fundaran las primeras asociaciones "antisectes", como la Association de Défense de la Famille et de l'Individu (ADFI), que recomendaban (como la REDUNE aquí) que las denuncias se presentaran como delitos de fraude. Más tarde, en 1996, el sistema judicial frances parío una cosa de nombre Circular Toubon que apremia a los fiscales para que se investigue sí o sí cualquier denuncia en la que aparezca la palabra "secta", aunque probablemente el aparato estatal más potente en la intervención de las libertades de conciencia y culto sea la Miviludes (Mission Interministérielle de Vigilance et de Lutte contre les Dérives Sectaires), que es una comisión interministerial de VIGILANCIA y LUCHA, o sea de persecución religiosa sin pudor, sin mala conciencia, todo beatitud y sentido de la higiene social. Osease, el modelo más acabado de Laica Inquisión que actualmente se conoce en el mundillo de la cosa relisiosa.

Sobre "secta" y "religión"

Nadie sabe a ciencia cierta qué puñetera diferencia hay entre secta y religión aunque en general se asume que la diferencia tiene algo que ver con los procesos de "rutinización del carisma" que decía Weber, esto es, con la historia política concreta de cada grupo que se organiza en función de sus creencias sobre el Más Allá o Dios. Digo que nadie sabe a ciencia cierta ésto porque hay dos fuentes (las Ciencias Sociales y las Ciencias Jurídicas) y las dos fuentes proponen modelos, categorizaciones abstractas, que en la realidad social resultan difíciles de aplicar la mayor parte de las veces. Por ir a lo técnico, en Sociología se sigue asumiendo la idea weberiana de que las sectas son grupos "cerrados", mientras que las religiones son cosas "abiertas". Pero semejante distinción no distingue nada de nada. Y si no intente colarse en un rito "religioso" a ver cómo le miran antes de echarle del garito. Siendo más estrictos aún, Weber decía que lo sectario consistía en la ausencia de proselitismo, la ausencia de acciones para buscar nuevos miembros, pero esto sabemos que también es falso incluso para los casos que Weber analizaba. Desde el Derecho existen ambiguedades parecidas. En algunas sentencias dictadas en España (muy estigmatizadora de la diferencia religiosa, pero poco perseguidora en lo legal, comparada con Francia), lo sectario en sentido negativo (o sea delictivo) aparece vinculado al adjetivo "destructivo", pero en ambos lugares también hay un uso aparentemente neutro del término secta, reservado para grupos relilgiosos particularmente pequeños o particularmente extravagantes, según toque y según quién decida lo que es normal y anormal en términos de creencias y prácticas. Lo que todos estos casos tienen de común en la dimensión legal, y a veces también en la literatura sociológica, es un fuerte componente psicologicista en la clasificación de un grupo como secta. Siguiendo la pauta que estableció la psicóloga de Berkeley Margaret Singer, la clave del asunto es que lo sectario es equivalente a "brainwashing" (lavado de cerebro) y "mind control" (control mental). Y este enfoque se ha venido aplicando sistemáticamente a toooodos los casos en los que hay un proceso de "conversión".

Desde el punto de vista jurídico, las sectas son una realidad que emerge en forma de denuncia de ex-miembros. Las historias de estos ex-miembros son historias de conversos que han entrado y salido de un grupo en el que han vivido experiencias lo bastante terribles para ellos como para iniciar un proceso con la denuncia. Cuando se trata de grupos minoritarios y el marco legal lo permite, una sentencia en contra del grupo en cuestión puede causar la ilegalización del grupo y sus prácticas. Este es el caso de la Cienciología en Alemania, donde fue acusada de "totalitarismo" y ha sido "prohibida".

Por el contrario, las denuncias contra iglesias mayoritarias suelen ser de personas que han "nacido" en la comunidad religiosa y no suelen ser denuncias de fraude relacionadas con abusos entre adultos en situaciones vulnerables. El control mental y el lavado de cerebro no son elementos que aparezcan habitualmente en una denuncia por fraude parroquial. Cuando un cura se ha fundido la pasta del cepillo en un casino nadie lo acusa de abusar de personas vulnerables vendiéndoles motos sobre la salvación del alma ¿no? Y sobretodo, ningún tribunal europeo ha expulsado a iglesias cristianas del suelo nacional porque los curas hacen esto y lo otro. Ni siquiera en los terribles casos de abuso infantil demostrados, que son para pensárselo. Se penaliza a los responsables y punto. No se pone en cuestión si el paraiso existe, el apocalipsis se acerca, la virgen era virgen o Dios es Cristo. No hay discusión doctrinal. ¿Por qué hay discusión doctrinal de los fiscales sobre las creencias minoritarias? En fin... por otro lado, aunque no se usen los términos mind control y brainwashing, la manipulación del prójimo es susceptible de darse en cualquier parroquia, y la leyenda del párroco que se queda con los ahorros de las viudas es un clásico español...

Por tanto, la diferencia entre secta y religión no se refiere realmente a los grupos religiosos de un tipo o de otro, con una organización u otra. La diferencia vigente entre ambos términos es parafernalia jurídica para ejercer la persecución de creencias minoritarias. Es la versión contemporánea de la herejía.

El electrómetro de Hubbard es un puntazo

Más allá de estas cosas serias, quiero decir que me pido para mi cumple un E-Meter de la Cienciología, sí o sí. Uno de los argumentos de la fiscalía francesa contra la Cienciología es que el chisme éste vale un ojo de la cara y no funciona. El electrómetro Hubbard es un aparato para medir variaciones en la resistencia eléctrica en relación a la conductividad de la piel. Lamentablemente, cuando estamos enfermos estamos más dispuestos a creer que sonreir al universo nos va a sanar, o enchufarnos a la batería del móvil nos puede quitar el dolor. Supongo que todos en una mala situación probaríamos cualquier cosa, pero un electrómetro es como un ohmmetro chulo, y ya. Lo mejor de éste no es su potencial curativo, no. Lo mejor de éste es que Hubbard quería comprender las emociones de los tomates con él!!!

En esta foto vemos al fundador de la Dianética midiendo los sentimientos de un tomate. Y lo mejorcísimo de todo es que, en efecto, "descubrió" que los tomates "sufren" cuando se cortan en rodajas (tal cual, lo juro). Pero vamos, que al parecer sí que notan cierta incomodidad los tíos. Lo siento por los vegetarianos ideológicos, en serio, es un flash. ¿Sueñan los tomates con medidores eléctricos?
  • Web oficial de Ronald Hubbard, qué crack, señor... homófobo, misógino, sanador de tomates, profeta, alienígena y condecorado (revista Life) por haber inventado el quinto cacharro más absurdo del siglo XX (el E-Meter) y por haber escrito la peor obra de ciencia-ficción de la historia en su totalidad (Mission Earth), diossss...

[Aquí un modelo de uso doméstico -->]

[Me pregunto por qué los fiscales franceses no denuncian a la teletienda completa...] 

[O a las mismas farmacéutcas que se querellan contra los cienciólogos...] 

[A mi no me funciona el chisme de medir la tensión...]

[Lo compré en la farmacia, eh?... no en teletienda, a ver...]


Gracias a Jacobo por ponerme a perseguir este notición.

11 Comentarios:

3 de febrero de 2012, 13:50 Anónimo dijo...

Yo empecé a estudiar Antropología en la UNED, en las tutorías del paseo de Prado, y me gustaba deambular por "el Madrid de las letras", "el parnaso", antes de acudir a las tutorías.
Una tarde por la acera de impares de la calle del Prado, antes de llegar al cruce con Santa Catalína, me abordó un señor que me interpeló sobre la necesidad de conocer nuestra situación energética frente a la degradada situación social, cómo nos afecta la contaminación y algunas cosas que ya no recuerdo muy lúcidamente. Lo cierto es que me encontré a unos seis metros del lugar donde me abordó inicialmente agarrada a unos cilindros de aspecto plateado que estaban conectados a unos cables que salían de un aparato que se parecía al estabilizador de la primera televisión que tuvimos en casa.

La aguja se movió y el señor interpretó que yo debería estar asombrada por el resultado. Como yo yo no sabía que quería decir aquellos movimientos de la aguja del aparato, que estaba conectado a los cables que estaban unidos a los cilindros que yo tenía agarrados en mis manos, pues eso, el señor me propuso que comentara mi asombro con él y con sus colegas, apuntandome a algún cursillo; pero a mi me quedaban cinco minutos para entrar en la tutoría "parentesco" de Nancy Konvalinca; me deshice de el sujeto de una forma mas o menos pacifica, pero ahi queda lo del Hubbard.

Ana la de la Carpetana

6 de febrero de 2012, 10:27 Anónimo dijo...

has dejado pasar de largo la Salvación!! la salvación energética!! pero cómo no me lo habías contado antes!!

jajajajaja


M.

6 de febrero de 2012, 11:40 Anónimo dijo...

Pues ya ves


Ana

7 de febrero de 2012, 9:11 Anónimo dijo...

Comentario carpetánico "reflexiones carpetovetónicas":

Yo creo que no hay grupo social sin dios, ni hay un diós que no represente a ningún grupo social.

En España en cada pueblo existe un patrón o una patrona; que para mí son como los dioses locales entorno a los cuales se organizan festividades, preces, y se generan identidades locales. A veces son santos, a veces son vírgenes, otras son "cristos" (=los que se emperran en morir por una idea); la Iglesia Católica ha decidido denominarlo "advocaciones".

Pero ¡¿no es esto el politeismo del que tanto renegamos?!.

¿Puedo yo verlo tan claro?. ¿ nadie más lo ve?

Por favor recomendarme a algún profesional, aunque sea del electroschock.

Ana la de la Carpetana

23 de febrero de 2012, 11:00 Anónimo dijo...

OKey: McKey.
Secta = Creencia minoritaria.
La evolución del concepto "herejía", es la "secta".
Aquí hay que reconocer que han perdido puntos los correligionarios de las sectas respecto a los herejes. Tengo la impresión de que los "herejes" eran más valorados por interpretarse como peligrosos para la sociedad, más poderosos acaso, que los "adeptos", que se interpretan como debiles mentales atrapados por creencias.

Es más a los primeros se los quemaba en las plazas públicas (que peste, lo mal que huele la gente quemada), a los segundos se los compadece y se les interna en instituciones psiquiatricas (cuando loa servicios sociales dan para ello).

Lo cierto es que a los abducidos por las sectas, se les condena a la muerte social, pues pasan a ser considerados debiles, atrapables, engañables, en fín, pierden la posibilidad de ocupar un rol social preeminente.

Es el mejor resumen que podría hacerse. ¡A pesar de no gustarme los resumenes!.

Ana la de la Carpetana

25 de febrero de 2012, 10:30 Anónimo dijo...

Continuación de las reflexiones carpetovetónicas del 7-2-12.

Es tan importante diferenciarse del pueblo de al lado, que villorrio de arriba, tiene distinto patrón que villorrio de abajo; incluso las fiestas patronales se celebran necesariamente en semanas distintas.

El señor Gauss (famoso tañidor de campanas, además de matemático), tiene una sesuda ecuación para calcular la fecha exacta en que debe caer la Pascua cristiana, para que nunca, jamas de los jamases, coincida con la Pascua judía de la que nos separan ritos y mitos como todos ya sabemos.

Solo los estados imponen fiestas supralocales, nacionales e incluso ecuménicas (eso va por el estado Vaticano).

Cuando una comunidad cultural se disgrega de otra, invoca inmediatamente una separación de patronos (¿totems?, o dioses, o patronos o vírgenes), unas fechas festivas diferentes y unos cambios en los ritos, en las especificidades gastronómicas, en la alfarería o en las vestimentas, sobre todo en las vestimentas festivas o en las sacramentales.

Lo que pasa es que siempre hay instituciones con pretensiones hegemónicas, que asumen y reinterpretan las aspiraciones culturales y/o sociales de cualquier comunidad; pero no voy a hablar de los imperios que eso ya lo hacen muy bien Jane Burbank y Frederick Cooper, en Le Monde diplomatique de diciembre de 2011.

Pero las inquietudes sociales de cualquier comunidad, es un hecho que, producen una inquietud para cualquier institución con caracter hegemonista, en el sentido de reinterpretarlas y devolverlas a la comunidad en un formato aceptable para la comunidad y legitimable para la institución en cuestión.

Ya seguiremos.

Ana la de la Carpetana

7 de marzo de 2012, 12:01 Anónimo dijo...

Ya lo creo que sufren los tomates cuando los cortan, y los cables de la luz cuando se queman y las tuberías cuando revientan, y los madrileños cuando nos apretamos en el metro. Si se establecen unos parametros de normalidad, cualquier cosa que los haga variar, produce cambios, o stress,o sufrimiento.

La literatura nos acompaña en alguna reflexión que otra cuando Manuel Vincent, hace ya algunos años comentaba que una madre albano kosobar expresaba un grado de dolor y preocupación ante la muerte de un hijo en muchas ocasiones similar al que expresaba una mujer madura española ante el hecho de que se le caducaran los yogures del frigorífico. Los sentimientos estan mediados por la cultura, sobre todo la expresión de los mismos.

¿Los tomates sufren?, pues dice Hubbard que dice su voltímetro que si, que mucho.

Ana la de la Carpetana

13 de marzo de 2012, 10:28 Anónimo dijo...

Las racionalizaciones científicas de Dios, del creacionismo y de la historia, terminan por molestarme más que las devociones a santos, patrones y vírgenes. Acabo siempre poniendo cara de "malhuele"; en realidad debe ser que me molesta pensar en la complejización que supone, que el pensamiento racional se meta a enrredar esquemas simbólicos que a mí me resultaban más fáciles y esquematizables.

Yo que había hecho mi clasificación en la cual metía en el mismo cajón epistemológico a (A)[aldeanos, devotos, iletrados, paletos, "individuos-malllamados-primitivos", religiosos, meapilas, cofrades, salvapatrias, electricistas algún que otro tecnocrata de la administración, etc.], y en el cajón (B)de [cultos, intelectuales, científicos, universitarios, pensadores, filósofos, astrofisicos, politólogos, sociolodgos e incluso los físicos de particulas elementales], y que tenía claro, lo que podía salir de cada uno de los cajones (A) o (B), me encuentro con que de vez en cuando un universitario o un economista, aplica el método científico para demostrar la existencia divina o incluso que utilicen sensores de medir el sufrimiento de los tomates, para medir la infelicidad que nos produce la lejanía de Dios o las discrepancias con la fraternidad universal.

La reflexión me lleva a pensar en cuando una cultura entra en contacto con otra cultura, que ideas de (A) pasaran a (B) que efectos producirán, y viceversa. Se cambian las reflexiones pre-confesionales, por los voltímetros, o los evolucionismos por los intervencionismos divinos.

...voy a despedir a mi psicoanalista, que me mira con cara de electrocutada... . La verdad es que me gustaría que alguna vez me dijera algo, aunque sea: "...ya callate loca...", antes de mirar el reloj.

Ana la de la Carpetana.

16 de marzo de 2012, 11:19 Anónimo dijo...

Mirad lo ultimo en fusión. El frikismo en folklore tambien es importante.

http://wtf.microsiervos.com/frikismo/darth-vader-gaita-monociclo.html.

Eva, Evaristo

21 de marzo de 2012, 2:52 cornix dijo...

muy bueno Eva!!

2 de abril de 2012, 14:13 Edward Casas dijo...

Ambos son una ciencia, la religión exige bastante estudios al igual que la ciencia, sin embargo son teorías tan distantes que es normal ver siempre el mismo conflicto, dónde ambos se disputan quien tiene la razón.

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